"Nacida para amarte”, palabras arrancadas de una maldición que le auguraba dolor y angustia. Sin embargo, Marcus McLavert estaba ansioso por encontrar a la mujer nacida para él. Morganne lleva toda la vida soñando con un hombre al que esta unida por su nacimiento. El destino de ambos está marcado por una maldición que tan solo el amor puede cambiar.