A Michelle Connan le encantaba hacer toda clase de cosas con papel. Desde aviones, flamencos, vestidos, edificios, casitas y personas. Sobre todo personas. Pero las personas le enseñaron que los monstruos eran reales. Las personas fueron los monstruos. Y ella, tonta, se enamoró de su "Querido Monstruo de Papel". Cosa que, para que su enamorado sepa quien es, enviarle las pequeñas y cursis cartitas de papel, fue inevitable. ______________________ Historia registrada en Safe Creative. Prohibido el plagio. NO ADAPTACIONES. Te ruego en verdad, que no robes ideas mías, ya que me costó mucho imaginar mis diferentes mundos de escritura. Gracias! Hermosa portada hecha por @SnipeckEditorial