La verdad nunca tuve la oportunidad de decirle esto cuando estábamos molestos; sentía que si se lo decía las cosas se complicarían más de lo que estaban.
Creo que él nunca lo supo, pero le deje una carta en la mesa de la habitación con todo aquello que debía decirle de alguna u otra forma antes de irme; si lo nuestro hubiese terminado y no se lo hubiera dicho estaría arrepentida de no haberle hecho saber lo mucho que sentía por él y lo que sentí en el momento de enterarme que se iría de mi lado por un largo tiempo.
Las palabras iban mas o menos así.
- Juan; yo me enamore de ti como hoy ya nadie lo hace, de la manera mas linda que se pueda imaginar. Yo te fui amando de poquito a poquito, con calma y la mayor precaución... Hasta que decidí arriesgarme y amarte como yo se hacerlo; lo que es dañino para mi ahora porque no quiero que estés lejos de mi en ningún momento, cuando tu no estas conmigo me siento vulnerable, tan pequeña, tan ingenua, tan torpe. No me siento como la yo de ahora, la que nació cuando te conocí; y me aferre tanto a ti que ahora me resulta difícil irme de tu lado... Pero tal vez dios quiere que las cosas sean de esta manera, quizás no este en el futuro un tu y yo juntos. Y la verdad es que esto me duele demasiado como a ti, porque Juan... Apenas te estoy recuperando y ya te perdí. No quiero vivir el resto de mi vida pensando en que momento de ella te volveré a perder por tercera vez, eso no seria lo correcto; por eso decidí romper contigo... Y no lo hago porque no te ame. Al contrario, lo hago porque te amo.
ATT: Maya Hernández.