
Créeme, valdrá la pena, yo sé por qué te hago esperar – Atte. El destino. A menudo sentimos esa extraña sensación donde la casualidad, lo inesperado, va poniendo marcas en nuestro camino obligándonos a encauzar la vida en una dirección u otra. Hay quien dice que son designios del destino, de esa fuerza que está por encima de nosotros y que nos empuja hacia una sucesión inevitable de acontecimientos, de los que no podemos escapar.All Rights Reserved