Cuando lo que lees en las historias de ficción de tu app favorita no se acerca ni lo más mínimo a la realidad. Cuando al cerrarse una puerta la timidez del joven de los ojos cielo se pierden dejándose poseer por toda clase de mórbidos pensamientos. Si alguna vez pecaste sin sentir remordimiento, entenderás el placer que se puede sentir tras cometer alguno de estos pecados capitales. Sus cuerpos y almas ¿podrán soportar el vaivén de emociones que todo esto les traiga?