-¿Prefieres ron o ginebra?
Tenía que emborracharla o no le entraría ni de coña. No sería la primera vez que me quedo con las ganas por el miedo que les entran con eso de "mi primera vez", eso junto a los nervios hacen la combinación perfecta para que su vagina se convierta en una pared infranqueable.
-Hmmm rrrron.
No entiendo esos nervios, por whatsapp no es tan cortada, o bueno, si los entiendo, todas las personas no pueden ser tan guarras como tú. ~Me sarmoneo a mi mismo.
-¿Oye estás segura? ~Le digo con tono cálido y cariñoso mientras la miro tiernamente.
Como diga que no la echo de mi casa.
-Sí.. Es solo que estoy nerviosa.
-No te preocupes tonta, sabes que tendré mucho cuidado en todo momento, se lo especial que es para ti.
-Lo sé, confío en ti. ~Me dice en un tono y una expresión facial más relajada.
Me relajo al ver que no me quedaré con el calentón y me acerco para darle la copa mientras le retiro el pelo dejando descubierto parte de su cuello y una de sus orejas.
La beso mientras da un sorbo.
Dos sorbos.
Tres.
-¿Tenías sed no? ~Le susurro.
Suelta la copa.
Juguemos.
Miguel es un chico joven, y como para cualquier chico joven, sus experiencias sexuales, comienzan. Algunas quizás sean típicas, otras no tanto. Entre estas, intenta resolver su gran duda existencial, ¿está o no está enamorado de su exnovia? y su gran dilema, ¿una vida de experiencias sexuales y promiscuidad sin compromiso, o convertirse en un chico formal y pareja de la chica de la que cree estar enamorado?.
Te invito a conocerlo a él y a sus experiencias, espero que te gusten.