Numero Desconocido
  • Leituras 513
  • Votos 22
  • Capítulos 2
  • Leituras 513
  • Votos 22
  • Capítulos 2
Concluído, Primeira publicação em ago 01, 2015
Yo Victoria una chica,común,de Buenos Aires.Tenia algo que ninguna tenia y era un número,no era cualquier numero,era el de Abraham Mateo Chamorro.
Una Mañana de Julio del 2015,Me llego un mensaje el cual era privado,el decía:-Victoria te estoy vigilando y cada día o ves que te mire quiere decir que mas te ame-.
Ese numero me manda mensajes todo los días así que decidí enviarle uno yo el decía:-Muy buenos días no se con quien me estoy comunicando pero le quería decir que me encantaría hablar en persona por temas personales,los cuan no quiero y no puedo enviarlos-.
A las 17:15 Me respondió:-Buenos días. 
Le quería comentar que nos veremos
a las 14:30 en el restaurante Estrellas 
Con cariños.-si lo leías parecía una cita ¡Pero No!
Era descubrir quien era esa persona.13:00 me fui a bañar y a las 14:29 sonó el timbre hay estaba el el chico de mi vida Abraham Mateo.Y me dijo-Hola¿Vamos?
-Si-le dije mientras me ponía cada ves mas roja-Tu eras-.
-yo soy tu numero desconocido-.
Con Amor Abraham
Todos os Direitos Reservados
Inscreva-se para adicionar Numero Desconocido à sua biblioteca e receber atualizações
ou
Diretrizes de Conteúdo
Talvez você também goste
Somos lo que queda 2 | PATRICIO SARDELLI, de ImSarahLuxe
58 capítulos Em andamento Maduro
Todo parecía estar en su lugar hasta que la vida me demostró que aún podía ser más cruel conmigo. Durante años me convencí de que mi fortaleza radicaba en no mostrar debilidad, en esconder mis emociones bajo capas de indiferencia. Pero cuando Patricio apareció en ese restaurante, todo lo que había construido se hizo pedazos, dejando una cicatriz mucho más profunda que la que ya llevaba en el pecho. Viví detrás de una mentira descomunalmente grande, aprendí de mi mamá que lo único en lo que debía confiar era en mi desconfianza. Y Patricio, el hombre que entró en nuestras vidas como "el novio de mi mamá", resultó ser la última prueba de esa amarga lección. El tipo que me había dicho que estaba enamorado de mí un día, al siguiente le pidió casamiento a mi mamá, como si nada hubiera pasado. Y entonces, me fui. Fue un golpe tan certero que todo lo que conocía se desintegró. No sabía cómo quedarme sin romperme por completo, así que desaparecí. Me tomó meses entender lo que me había pasado y no hablaba únicamente de lo que Patricio había significado o lo que mi mamá me había hecho. No, todo era mucho más complicado cuando me sentaba a analizar el derrumbe que fue mi vida. A pesar de todo, algo dentro de mí me dijo que esto no iba a ser el final. Aunque el dolor era inmenso, me fui con la promesa de que volvería, que me levantaría nuevamente, aunque fuera con las manos temblorosas y el corazón hecho mierda. Porque al final, no somos lo que queda, somos lo que hacemos con los pedazos que quedan.
Somos Imposibles | PATRICIO SARDELLI, de ImSarahLuxe
51 capítulos Concluído Maduro
Yo no debería sentir esto. Cuando lo conocí, la risa de mi mamá llenaba el restaurante, armonizando con la música tenue y las luces bajas que dibujaban sombras suaves en las paredes. Estaba sentada a su lado, con una copa en una mano y sus dedos entrelazados con los de él. Patricio. El nombre quedó flotando en el aire mientras él levantaba la mirada. Pero yo apenas lo escuché. Todo en mi pequeño mundo caótico pareció cambiar cuando sus ojos oscuros y fugaces se cruzaron con los míos, atravesándome de una forma que no supe descifrar. -Él es Patricio hija...al fin lo podés conocer-dijo mamá, con una sonrisa tan amplia que casi me dolió. Extendí la mano a través de la mesa con gesto automático, pero algo en mí se tensó al sentir el roce cálido de su piel contra la mía. -Un gusto, Barbara-murmuró él, arrastrando mi nombre en un tono que mezclaba calma e intensidad. Y de repente, todo sucedió. Una chispa, una corriente eléctrica que recorrió mi columna y me dejó paralizada. Algo en mí se quebró en ese instante. Tal vez fue la manera en que me miró, como si ya me conociera, o esa voz suya que parecía diseñada para instalarse en los rincones más profundos de mi mente. El aire del restaurante se volvió pesado, como si el espacio entre nosotros estuviera cargado de algo invisible. Fue un quiebre silencioso, pero definitivo, que marcó el inicio de algo que no podía controlar, algo que no debía permitirme sentir. Pero la certeza de que Patricio estaba fuera de mi alcance no apagó el incendio que su presencia provocó en mi pecho. Una chispa, pequeña e intensa, comenzaba a devorarlo todo y la poca moral que me quedaba...empezaba a verse difusa bajo la mirada del nuevo novio de mi mamá.
La agonía de ser tuya | GUIDO SARDELLI, de ImSarahLuxe
43 capítulos Concluído Maduro
Enamorarse de alguien que parece inalcanzable es como perseguir un espejismo: cuanto más cerca estás, más se desintegra la ilusión. Arlén pasó años soñando con ser vista por él, Guido Sardelli ese cantante de Airbag del que ella había escuchado tanto, creyendo que el amor podía trascender las barreras del escenario. Pero cuando finalmente lo tiene frente a sí, la distancia emocional entre ambos es más insalvable que la fama misma. El deseo de ser parte de su vida se convierte en obsesión. Cada gesto de atención la hace hundirse más en una fantasía que demanda una entrega completa, incluso cuando él no puede -o no quiere- corresponder de la misma manera. Atrapada entre la admiración y la necesidad de ser amada, su identidad se diluye. Ella no es más que una versión de sí misma moldeada para encajar en su mundo, esperando que él la reconozca como alguien más que una seguidora devota. Pero en ese juego desigual, termina perdiéndose. En su obsesión, ella imagina que ser mayor, más madura, la haría digna de su amor. Sin embargo, la realidad es más cruel: incluso entonces, él podría seguir siendo una figura distante, y ella solo otra historia efímera en su vida de excesos. Lo que comienza como una historia de ensueño se transforma en un ciclo de expectativas rotas y desilusiones silenciosas. La relación deja de ser un refugio y se convierte en una jaula emocional, donde amar significa destruirse poco a poco. Al final, ella descubre una verdad amarga: no importa cuanto ames a ese cantante con el que soñaste todos los días de tu vida, ni eso a veces es suficiente. En medio de las cenizas de lo que creía amor, queda solo un vacío. Un sueño inalcanzable que, en su obsesión por hacerlo real, la dejó sin nada.
El fuego que nos incendia - Guido Armido Sardelli, de elqueluchasube
16 capítulos Em andamento Maduro
Renata Campos, una periodista excepcional y bastante reconocida de la Argentina, regresa a la ciudad de Santa María de Punilla luego de que la convocaran para cubrir, por sexto año, uno de los festivales más importantes que existían en el país. El Cosquín Rock, aquel lugar que tanto le dió y que la emocionaba profundamente, ahora solo le traía recuerdos de aquellos sentimientos que creía tener superados. En donde enfrentarse a este festival no solo la ponía a prueba en cuanto a lo profesional, sino que también en lo personal. El Cosquín significaba reencontrarse con personas que no quería ver, o por lo menos no ahora que su vida había encontrado el rumbo que hace unos años atrás daba por perdido. Aquel amor que nunca fue y nunca sería, volvía para desestabilizar cada aspecto de su vida. Y es que Guido Sardelli no era un hombre cualquiera para Renata. A pesar de que la historia que compartían era bastante esporádica; la pasión y la química entre ambos era notoria, difícil de ignorar. A sus treinta y tres años creía tener su vida completamente resuelta; tenía un trabajo que la apasionaba, un departamento que pudo comprar gracias a todos los años de esfuerzo y dedicación, pero sobre todo había algo que valía muchísimo más para ella: un amor correspondido con el cual venía soñando desde que era tan solo una adolescente ingenua. Pero una serie de encuentros con Guido, el responsable de matar aquellas ilusiones, fueron suficientes para que se empezara a replantear si realmente era feliz con la vida que llevaba. Entre entrevistas y shows, Renata deberá enfrentarse a una disyuntiva entre el pasado y el presente. ¿Podrá escapar de la rutina y reinventarse o su moral la condenaría a una vida totalmente monótona y vacía?
Talvez você também goste
Slide 1 of 10
Somos lo que queda 2 | PATRICIO SARDELLI cover
𝐓𝐔𝐘𝐎 𝐒𝐈𝐄𝐌𝐏𝐑𝐄 - 𝐏𝐀𝐓𝐑𝐈𝐂𝐈𝐎 𝐒𝐀𝐑𝐃��𝐄𝐋𝐋𝐈 cover
EL VIAJE cover
VERTE DE CERCA | Patricio Sardelli - AIRBAG cover
Somos Imposibles | PATRICIO SARDELLI cover
La agonía de ser tuya | GUIDO SARDELLI cover
Ganas de Verte | Guido Sardelli cover
El fuego que nos incendia - Guido Armido Sardelli cover
PAPARAZZI | Patricio Sardelli - AIRBAG cover
Es Una  Realidad cover

Somos lo que queda 2 | PATRICIO SARDELLI

58 capítulos Em andamento Maduro

Todo parecía estar en su lugar hasta que la vida me demostró que aún podía ser más cruel conmigo. Durante años me convencí de que mi fortaleza radicaba en no mostrar debilidad, en esconder mis emociones bajo capas de indiferencia. Pero cuando Patricio apareció en ese restaurante, todo lo que había construido se hizo pedazos, dejando una cicatriz mucho más profunda que la que ya llevaba en el pecho. Viví detrás de una mentira descomunalmente grande, aprendí de mi mamá que lo único en lo que debía confiar era en mi desconfianza. Y Patricio, el hombre que entró en nuestras vidas como "el novio de mi mamá", resultó ser la última prueba de esa amarga lección. El tipo que me había dicho que estaba enamorado de mí un día, al siguiente le pidió casamiento a mi mamá, como si nada hubiera pasado. Y entonces, me fui. Fue un golpe tan certero que todo lo que conocía se desintegró. No sabía cómo quedarme sin romperme por completo, así que desaparecí. Me tomó meses entender lo que me había pasado y no hablaba únicamente de lo que Patricio había significado o lo que mi mamá me había hecho. No, todo era mucho más complicado cuando me sentaba a analizar el derrumbe que fue mi vida. A pesar de todo, algo dentro de mí me dijo que esto no iba a ser el final. Aunque el dolor era inmenso, me fui con la promesa de que volvería, que me levantaría nuevamente, aunque fuera con las manos temblorosas y el corazón hecho mierda. Porque al final, no somos lo que queda, somos lo que hacemos con los pedazos que quedan.