Todo empezó cuando descubrí una vida llena de mentiras. Esa vida era la mia. Aquel día sentía odio hacia todo el mundo que me rodea y hacia mi. Vivía dobre la inocencia de una niña pequeña, donde todo era de colores. Abrí el buzón de casa, cogí las cartas debido a la tormenta y las puse sobre la mesa. Había una carta abierta. NO DUDÉ EN ABRIRLA. LA ABRÍ.