Amalía es una chica que nunca pidió ser fuerte, ella solo quería vivir una vida normal con una familia normal, pero desde que su padre murió, las cosas no han estado bien del todo. Luna llega a su vida cuando ella necesita compañía, y desde el momento de su adopción, Amalía la consideró su amiga. Luego, ella conoce a Nathalie y a Esteban, y junto a ellos comienza a sentirse normal, pero todo lo que sube tiene que bajar. "Luna, creo que sí soy una bomba a punto de explotar, y nadie jamás sabrá qué cable cortar."