- ¿Alguna vez has tenido la sensación de estar perdiendo la cabeza lentamente? - preguntó sin apartar la mirada del techo, que en su día fue blanco pero ahora es de un frío gris. - Constantemente. - respondió apartando uno de sus mechones rubios tras su oreja. Esta novela puede tener contenido fuerte así como lenguaje y acciones violentas que no deben ser seguidas en la realidad. Todo lo aquí escrito es pura ficción, nada de lo que se cuenta ha pasado. Por último pido un cierto nivel de madurez a la hora que leer porque embarca temas como la homosexualidad (que debería ser tratado como un tema trivial que lo es), adicciones, etc...