Las redes sociales.
Que tres palabras tan insignificantes y a la vez tan grande.
Los momentos más importantes de nuestras vidas pasan a través de pantallas, como fotos, FaceTime o una simple llamada. Así es como surge esta historia.
Cuando dos personas están destinadas a estar juntas el universo se encarga de juntarlas. Puede ser en el supermercado con un toque de manos que se atraen inevitablemente, los dos iban a comprar ese chocolate blanco que tanto miran con deseo. O puede ser en la calle, ambos iban corriendo y sin darse cuenta chocaron, el perro de él casi se escapa y ella iba a llegar tarde al trabajo. Qué mundo tan pequeño.
O simplemente en una app, donde ambos se crean un perfil sin saber lo que les espera.
¿Pero sabéis qué esta en juego?
La distancia, dos teléfonos y dos corazones. O era el internet, las playas y los mosquitos. Vamos a descubrirlo juntos.
Freen era una omega bastante rara para la personas aquellas decían que era un poco más alta para ser una omega otros que podría dar miedo si te miraba y algunas personas solo quedaban enamorada de verla aunque para Freen todo era normal pues siempre era amable y nunca se enojaba atenta con sus seres queridos era la chica perfecta como sus padres solían decir.
Becky una pequeña omega tan hermosa como la primera nevada era una chica responsable y cuidadosa con todo lo que hacía vive esperando a que aquella omega aparezca una vez más a su vida pues recuerda que alguien la salvó cuando era pequeña más no recuerda su rostro así que vive con la ilusión de que algún día aparecerá.
Pero ¿Qué pasaría si la persona que espera aparece en último año de universidad? ¿La reconocerá?