Claire se muda sola a Chicago con motivos de ir a una nueva universidad. Para ello alquila la habitación de la casa de una chica; pero no esperaba encontrarse con que la "dueña" era un chico. Era Jake: arrogante, mujeriego y sexy... Empiezan los problemas, las locuras, el peligro, las fiestas... Y sobre todo la tentativa e incomprensible atracción. Son tan diferentes y tan iguales en tantos sentidos. Son incompatibles, pero desafían las leyes. Se odian. Se necesitan. *** "-Estás jugando con fuego, Claire. -Pero si no juegas con fuego... Te mueres de frío." "Por desgracia, somos adictos a lo que nos destruye. Yo soy adicto a ella. Y ella me ha destruido"