He me aquí, despertando de un sueño confuso, de un sueño que sólo ocultó lo que me negaba a ver. He me aquí desayunando mientras otros mueren de hambre, mientras mueren de sed; y yo al respecto nada suelo hacer.
Hoy no pude con el remordimiento, he intenté hacerlo, intenté negarlo, pero sin notarlo quede amarrado; apresado. Y no pude escapar, en mi mente no había mas idea que la de ayudar.
He me aquí, despertando mientras otros ya no lo hicieron jamas. Abriendo los ojos y moviendo poco a poco el cuerpo. Siento todo lo aquello que no había sentido, el cielo se viene abajo queriendo acabar conmigo, veo el llanto, escucho los gritos, siento el dolor. Y mi corazón enardecido aprieta los dientes, y ese sonido de su rechinido es oído sólo por mí... mismo que intenta no oírlo.
La gente muere, y a la misma gente le da igual, somos hermanos pero ns tratamos como enemigos. Cada día ya no sentimos; cada día somos mas fríos.
Y he me aquí.