Es buen momento para soltar mi sostén y dejar que entre aire en mi alma. Me trueno los dedos como de costumbre y comienzo a teclear, irracionales mundos de malabaristas subalternos, sigo inconclusa con la situación del que sentir, me asomo a la ventana y no hay un alma viva, tal vez la halla pero no estará viva para entonces solo sera ebrio malnacido tratando de crear polémica, joder por que me duelen las manos, esto es tan ilógico, toda mi familia duerme, ni siquiera saben lo mucho que amo dibujar, ni siquiera saben un fragmento de mi corta vida, pero que mas da, se oye el ladrido de un perro, quizás en ese momento pase un alma en pena a la luz de la luna, o un auto tan rápido como si quisiese volar, ¿los ebrios a veces deseamos volar?, si es asi entonces creo que moriré de embriaguez, cada latir de su cuerpo retumba en mis oídos, concéntrate, deja de pensarle, deberia temblar en este momento, me gustan los temblores, sacuden a la gente, es como un zumbido para despertar a los dormidos, de hecho es divertido, si sigo buscando palabras que terminen en do esto parecerá un rap barato, que asco, ¿Por que asco?. El maldito perro sigue ladrando, tengo frio pero me gusta, no pienso cerrar la ventana, me vuelvo a tronar los dedos, maldita costumbre, muchas luces encendidas en la ciudad, aunque debería solo existir la luz de la luna, cosas irrelevantes.
5 parts