Querida chica de la biblioteca,
Casi te pregunté que pasaba la primera vez que te vi llorando. Después vi el libro que estabas leyendo y me di cuenta de que. Estabas llorando por él. Y estaba interesado porque yo nunca había leído nada que me emocionara tanto. Me llevé el libro que estabas leyendo, ¿y adivinas qué? También lloré- sólo un poco-. Así es como empecé. Cada vez que voy a la biblioteca, tú casi siempre estas allí, siempre con un libro completamente nuevo. A veces sonríes, o reías ruidosamente, o lloras otra vez, y cuando lo haces, sacó el libro que estas leyendo.
Eso era, realmente, hasta que me di cuenta de lo grandiosa que eres. No eres guapa de una forma normal, pero dios, cuando sonríes, se te ilumina la cara de la mejor forma.
Ojalá me hayas notado, sentado a unas mesas más alejado de ti leyendo el libro que tu leáis unos días atrás. Ojalá me sonrías. No tengo el valor de hablarte. Tengo miedo de que no seas como yo te imagino.
Uno de estos días, reuniré el coraje y te preguntare sobre que estas leyendo. Y quizás sonrías con esa impresionante sonrisa, y me lo cuentes todo sobre él, y hablaremos sobre todos los libros que hemos leído. Pero hasta entonces, gracias por las recomendaciones de los libros, me encantan.
Con amor, Tyler.
***
Todos los derechos de "Dear library girl" están reservados para @pennyandpaper que es su autora original a la que le agradecemos mucho que nos haya dado el honor de traducirla.
Hemos querido traducirla porque es una historia que nos ha encantado y queríamos que pudierais disfrutarla tanto como nosotras.
Con mucho gusto merynlau.