Soy fanático de la expresión "Las reglas se hicieron para romperse". Lo que no esperaba es que la chica de la cual me fijara fuera una completa obsesionada con el orden y el respeto. Y dado a su responsabilidad, ella no rompía siquiera un plato. Pero, para eso estoy yo ¿No es así? Estoy seguro que mi misión en esta vida es hacerla cambiar de opinión. Y ¿Quién soy yo para desobedecer?