Me pregunto, ¿por que yo soy la única que los ve?
me llamo Amanda,tengo 6 años de edad, vivo con mis padres y soy hija única, se que no soy normal pero al menos tengo amigos, niños que solo yo puedo ver, no se porque.Mis padres dicen que soy especial, asen lo que pueden para serme sentirme bien pero mis amigos me pasan cuchillos y me quieren obligar a cortarme las venas, aveces lo hago pero otras no puedo porque mis padres me quitan los cuchillos, no estoy conforme con la vida que me toco, y mis amigos quieren ayudarme...
No puedo aguantarlo mas, así que me hago daño golpeándome duro en la cabeza contra la pared, mis padres me llevaron al medico y otros lugares, y dijeron que tenia "esquizofrenia" yo no se lo que es, pero no me parece algo bueno
Mis amigos son rojo, azul y amarillo, esos son sus nombres y aveces no son muy buenos conmigo y rojo me hace daño, no se porque.No me dejan sola ¡nunca me dejan sola!, me molesta mucho eso, grito y le pego a mis padres y a todos los que se pongan en mi camino, debo decir que soy realmente violenta cuando me molestan rojo, azul y amarillo.Duele, duele mucho y ademas no quiero a serle daño a mis padres pero no puedo controlarme, ¡VALLAN SE! siempre digo eso...
No puedo controlarlo, ellos me dicen que vienen de otro mundo, un mundo paralelo, mi paraíso perdido, mi pesadilla oscura.Un día ya no pude controlarlo mas, estaba en clases y salí corriendo de la sala la profesora me persiguió, yo subí al tercer piso y sin pensarlo mas me tire al vació.
Ahora mi paraíso no estará nunca mas destruido, porque yo ya no existiré.Ya no existirá mi paraíso perdido mi pesadilla oscura.
Tras la muerte de su padre, Kirsen Edevane se esfuerza por recuperar las riendas de su vida. Sin embargo, la llegada de siete nuevos y misteriosos alumnos al Instituto Reems convertirá su intento por recomponerse de las heridas del pasado en una misión imposible.
Porque Isaac, Thais, Elías, Kilian, Cyre, Aran y Shad, mejor conocidos como los Seven, han llegado por una única razón. Y cuando Kirsen la descubre, ya es demasiado tarde para escapar.
Y quizá también para sobrevivir.