PROLOGO Para hacerlo mas fácil, el un enviado de la muerte, yo una humana con una muerte pre-destina y la muerte que no quiso venir a matarme el mismo a matarme. El odia los objetos religiosos pero para mi mala suerte, soy atea y no tengo nada de eso en mi casa, bueno. Apenas me puedo mantener a mi misma con el trabajo que tengo, odio la religión y será así hasta que me muera.All Rights Reserved