Raimundo, con 24 años, acaba de terminar la carrera de Medicina y ha vuelto a Puente Viejo para quedarse. Francisca, de 22, se dedica a administrar sus tierras junto a su padre, Enrique Montenegro.
Ambos se conocen desde niños y la amistad inicial se convirtió en un amor puro e incondicional. Mantienen una relación consolidada durante años y han decidido dar un paso más comprometiéndose.
Han hecho planes de futuro, cada día se quieren más si cabe, están más felices que nunca organizando su próxima boda, esa con la que siempre han soñado... pero en ocasiones la vida, o mejor dicho, el ser humano, no lo pone nada fácil.
Os presento una historia de amor basada en la novela El secreto de Puente Viejo. Se centrará en los años que no se relatan en el libro ni salen en la novela.
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...