La vida de Alicia había sido desde el punto de vista de una persona normal, trágica. Desde pequeña tuvo que experimentar el sabor amargo de la muerte y que pareciera que el mundo decidió abandonarla a su suerte, la cual, había tenido que asimilar, no tenía.
Sin embargo después de un tiempo dejó de cuestionar al destino y empezó a asimilar con los brazos abiertos cualquier situación que se le presentara, fuera mala o buena.
Él.
Perfecto en el buen sentido de la palabra. Tenía prácticamente la vida resuelta, más aun así siempre buscaba superarse a si mismo. Creció como toda persona sueña, con una buena familia, con amigos y dinero, mucho dinero. Era guapo hay que admitir, sin embargo no había tenido muchas novias y al final él era el que las terminaba. Cuando la vida de la Alicia parecía que estaba mejorando, cuando creyó que todo cambiaría a su favor, su vida da un salto inesperado al encontrarse con este joven que la llevará a descubrir un sin número de emociones y sentimientos.
Entonces ¿Qué pasará?
¿Él logrará borrar los horrores del pasado de Alicia, o ella los traerá al presente de él?
Arthur Zaens, un multimillonario frío y desalmado que ha vivido en la oscuridad desde la desaparición de su esposa, dejándolo solo con sus dos hijas gemelas. Desesperado por encontrar una niñera que cumpla con sus estrictas expectativas, Arthur conoce a Lía, una ex escritora y editora recomendada por un amigo. Aunque su relación comienza de manera conflictiva, con discusiones y malentendidos desde su primer encuentro en un bar, Lía se convierte en la persona que poco a poco transformará la vida de Arthur y de sus hijas, desafiando su frialdad y cambiando su mundo para siempre.