Honestamente, no se que me ha ocurrido en estos ultimos dias...todo fue tan repentino; inicio un dia cualquiera, no recuerdo con exactitud la hora pero desde que nuestras miradas chocaron por accidente en esa aburrida clase , no hago mas que intentar no perderme de nuevo en aquellos ojos que me hechizaron en solo un instante, pero lamnetablemente el resultado es todo lo contrario.
Han pasado los dias, y sin pensarlo ya no solo era su mirada, si no tambien su voz y sus pequeñas atenciones las que me cautivaron, no se como explicar esto que siento cada que me saluda en las mañanas de esa manera tan sencilla en como pronuncia mi nombre o se rie de cosas que crei que nadie lo haria. Sin imaginarlo su nombre ya no podia olvidar, aun recuerdo que su nombre surgio de la nada en una platica con el viento en todos mis atardeceres.
Hace unos dias pudimos hablar, y no cosas tan comunes como "¿Que te gusta hacer?" o cosas asi, no, fue una platica tan casual y continua que parecia que nos conociamos de hace mucho tiempo, confieso que no me explico como es que es tan comodo solo conversar, no lo se.
Los meses pasaron, y experiente algo raro, "cosquillas", seria lo mas cercano a la descripcion de esto, sus brazos estan alrededor de mi, la primera vez que tuve un contacto mas alla que solo miradas y saludos, y no se como explicar que fue tan comodo, aceptare que no queria que acabara nunca ese momento
Un dia despues de habernos despedido al final de clases solo camine y llegue al parque de siempre y despues de terminar aquel libro que ya tenia tiempo leyendolo, me sente a admirar el atardecer del viernes con una bella melodia de violin de fondo, no me explicaba como era que su nombre llegaba de la nada y tampoco explico mi ligera sonrisa al escucharlo, cerre mis ojos y recorde todos los momentos del dia en donde su presencia estaba, no pude evitarlo...sonrei, y sin sentirlo, mi corazon entendio que solo sus ojos era lo unico que yo queria admirar y no quiero callarlo mas..
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.