Y otra vez, noto sus ojos sobre mi. (...) Nuevo mensaje: Ven a mi. (...) Abro la mochila, que esta colgada en mi silla de siempre, diferente a las demás, saco mi libreta blanca y escribo: "Otra vez, ella estaba allí. De nuevo, su mirada me siguió mientras caminaba. Una vez más, dejé de sentirme solo por un momento."