Que decir de ti
señora del Arcano?
de tus pálidas manos ,
del rostro sin bello,
y tus ojos serenos
que al mirarte me inquietas?
Quiero rogarte el secreto
que gozosa ocultas,
esa verdad profunda
de hermética ciencia,
elixir delicioso, codiciado y querido
del paraíso perdido
del cual provenimos.
Que caminos ocultan
esas ambas vías?
que le indican tardías
al buscador silencioso
las aguas de vida
del camino largo,
o el tránsito seco
del que realiza sin tiempo,
el oficio de Pedro
tallar en la piedra,
con ferviente valor
su propio interior,
morada divina
que acoge la chispa
de el mismo Dios.
Intuimos que tú eres
Oh! Madre divina,
El camino y el medio
dónde transitar,
seguir por tus pasos
Oh! Venerable Isis,
hasta que podamos
al fin despertar.
Levantado tu velo
de terribles misterios,
orientad nuestro anhelo
te rogamos ahora,
danos la fe, el valor
y la fortaleza espiritual,
para poder alcanzar
en tu divino oficio,
el cáliz divino
de la redención.
Porque tú eres Pentalfa,
el hombre perfecto,
guardando el secreto
de tu voluntad.
Eres el dulce aroma
que la rosa cruz exhala,
encendiendo la llama
del virtuoso corazón,
que arde desde hoy
y por toda eternidad,
para vivificar en ti
tal cual un altar,
la voluptuosidad
de la madre natura,
que venera y procura
la fraternidad universal.