Erick no era como todos. A él no le parecía nomal ver a sus amigos matándose entre sí. No importa cuánto tiempo lleve en ese lugar, el quería cambiar todo e iba a intentarlo. Cada segundo que pasaban en ese lugar era un infierno desconocido. Algunos le llamaban cárcel, laboratorio, todo menos hogar, a pesar de haber estado toda su vida ahí. La desesperación por salir de ahí los llevó a matar a sus propios amigos en las pruebas. Lo peor es que no sentían remordimiento alguno o almenos, eran buenos ocultándolos. ¿Y tú? ¿Dejarías que la desesperación te domine? ¿Que harías para poder pasar las pruebas? ¿Confiarías en los demás? Pero la pregunta más importante... ¿Matarías para sobrevivir?