-¿Por qué no pueden dejar de hacer daño? -pregunté llorando sin cesar. -No lo podemos evitar - respondió con firmeza- es como si nuestras acciones fueran propias, pero el destino nos impulsa a torturar, destruir, hacer daño y causar dolor, es imposible, porque es nuestra naturaleza, es lo que somos, Tu conoces la verdad, así que no intentes cambiarme, no pasará -fue lo ultimo que dijo. "Por amor aprenderás, y por amor lo romperás" En este momento ya se que me ocultaban pero sigo sin saber que soy.