Una de las mejores cosas para muchas de nosotros los adolencentes es cuando llegamos a ese momento tan particular de nuestras vidas en que muchas veces no invade la intriga y hasta la desesperación de saber en que momento llegará eso a lo que le llaman "amor", sin saber que en lo que menos te lo esperes y en el momento menos pensado ya te habrás enamorado.