Mi vida no es nada complicada de explicar. Baloncesto, rap, chicas... Desde hace algunos años todo ha sido una continua rutina. Desde primera hora de la mañana hasta última hora de la noche no pasa nada muy distinto a lo que ya he vivido la noche anterior. Así que, no hay cambios drásticos ni aventuras inéditas que pueda narrar. Ni siquiera fallo una canasta desde hace muchos años. Todo es igual. Todo. Incluso hace años que comparto mi rutina con el mismo grupo de amigos. Y, aunque parezca mentira, no me dado cuenta de esto hasta ahora. Ahora, que las cosas comienzan a ponerse interesantes (y, un poquito irritantes).