❝Uno no se enamoró nunca, y ése fue su infierno. Otro, sí, y ésa fue su condena. Uno jamás vio el arte de la luz y la esperanza, y ésa fue su desgracia. Otro, sí, y ésa fue su destrucción. Pero ambos sabían una cosa, que luego de tanto, los llevaría al cielo y a un bienestar tanto físico como mental. Muchas veces la guerra es la única que trae paz en un alma condenada al fracaso y el infortunio.❞ La mayoría de los personajes no me pertenecen, a excepción de los inventados propios. Todos los derechos de autor a Hajime Isayama.