-Te odio! -me retuerzo del dolor- -No me importa, no me importas -¿esto es enserio? -Cállate, ella es mejor -¿porqué? -¿Que? -¿Porque? ¿Porqué he sido tan idiota? -Nunca te he querido! -Mientes! -se acerca peligrosamente a mi boca y vuelve a romper mis esquemas cuando sus labios chocan con los míos-