La gente dice que el tiempo los es todo, en un segundo puede cambiar todo, tan solo lleva segundos decir una frase que cambie tu vida, puede ser tan destructiva como: Te odio. O tan cálidas como: Te amo. Pero siempre habrá una frase dicha en segundos.
El tiempo lo es todo para el mundo, pero... ¿Qué pasa cuando la gente muere?
Las almas vagan por el mundo, no tienen noción del tiempo ni del espacio. Simplemente se mantienen vagando hasta que son enviadas al cielo, donde los dioses deciden que harán con aquellas almas, con cada alma que han tenido había logrado dar un lugar excepto por una, la de un chico que se hacía llamar Suga.
Él era un caos, por lo que los dioses lo destinaron a, lo que ellos consideraban, un castigo. Permanecer en la tierra y en el cielo al mismo tiempo. Cada sesenta años iría a la tierra a vivir como una fantasma, permanecería seis años ahí y en determinadas fechas él podría ser visto por las personas.
Y lo que parecía ser el mejor castigo, se convierte en una gran tortura, cuando Suga conoce a un humano, que lo hará desear no haber sido cruel con los dioses.