Más que nada son cuentos que se me ocurren en el momento. No guardan absolutamente ninguna relación entre sí, por lo que ninguno tiene segunda parte. No hay ediciones, revisiones, nada demasiado formal. Sólo escribir para desahogarse un poco y echar a andar la imaginación. Si gusta, si no gusta, la verdad no importa demasiado.