“No se tu nombre ni tu edad, solo sé que amas ir a aquel puente y fumar cigarrillos mientras vez la corriente del rio llevarse las hojas de los árboles. Me gusta ver como sonríes mientras la brisa choca con tu rostro, al cual me gustaría tocar, me gusta saber que sonríes al menos unos segundos. No entiendo como una persona tan hermosa puede verse tan triste con aquella belleza mientras que podría tener muchos chicos tras ella. Tu cabello negro me enloquece. Tus son ojos azules pero aun así obscuros. Apuesto que cuando sonríes hay una luz en ellos. Me gustaría ver esa luz algún día pero no soy capaz de acercarme a ti. Me tiemblan las piernas cada vez que te veo. Prometo ser valiente algún día, y cuando eso pase te diré “hola” y a partir de ese momento tratare de hacerte feliz. Te hare feliz aunque sufra al intentarlo.” Pase la carta por debajo de su puerta y corrí hacia mi auto lo más rápido que pude. Mi respiración está muy tensa pero aun así estoy satisfecha. Solo espero que la lea.All Rights Reserved
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