Cuando tienes una hermana cerca de ti, una persona que te apoya y una persona en la que sabes que le puedes contar todo sin dudar ni un segundo... Todo cambia, te sientes bien porque sabes que siempre tendrás un hombro en el que llorar y te das cuenta de que, sin ella, tu vida no tendría sentido, de que los días serían aburridos...Y haces promesas con ella, de que cuando una de las dos muera, ella también moriría; pero luego, lo piensas, y te das cuenta de que toda la gente a la que le importas, a toda tu familia, a tus amigos...estarían mal. Entonces te das cuenta de que nunca más serás feliz, que todo te hará recordarla y que si tuvieras oportunidad de verla, aunque sea en tus sueños, te quedarías durmiendo todo el tiempo posible.