La hermandad.

Los humanos se han extinto, lo único que queda en la tierra son aquellos que han podido sobrevivir. No son humanos pero sus cuerpos son idénticos a ellos; seres favorecidos por los dioses, con poderes sobrenaturales son capaces de controlar los elementos:
Tierra, agua, aire y fuego.
Cada joven obtiene su don al cumplir los dieciséis años después de eso son entrenados y se convierten en un miembro activo en la hermandad. Todo fluye en armonía dentro de Caleb la pequeña parte que aun queda de la tierra. Pero hay un problema.
Los carroñeros, seres sin alma corrompidos por la maldad, con dientes filosos y garras letales se alimentan de la esencia de los miembros de la hermandad, capaces de destruir todo a su paso por lograr su objetivo destruir la hermandad y devastar la ciudad de Caleb.
Proteger Caleb nunca había sido tan difícil.
¿Que harías si tu vida se resumiera a eso?
¿Si luchar fuera primordial para sobrevivir?
¿Estarías dispuesto a arriesgar tu vida para mantener la paz?