Todos albergamos oscuridad y luz en nuestros corazones a veces más o a veces menos. Pero ¿Qué pasa cuando la oscuridad está latente y cada acción que tomes puede causar que esta se apodere de ti? Podía hacer lo que quisiera, llorar, reír, enojarse.... Hacerle creer a las personas un sinfín de emociones, pero si mirabas atentamente sus ojos podrías descubrir que detrás del brillo de sus ojos no se encontraba nada, una puerta cerrada con cadenas y candados por todas partes. Tenía miedo, miedo de ella misma, pero nadie es capaz de no tener sentimientos y eso lo descubrirá por su cuenta.... Y cuando el momento llegue tendrá que decidir... Pelear contra esa oscuridad dentro de ella. Permanecer siempre en control o ¿encontrar un equilibrio en su ser? El tiempo pasa y se va agotando... ¿Cuál será la decisión a tomar?