al describirla, aunque no lo intento, al entenderla, pero es un misterio,
al dibujarla, es un monumento
sin saber que al escucharla, me lleva al paraíso, su voz cautivante, aunque exagero, soy un velero acompañado de un amor sincero, este fiero cortejo, su rostro el mas bello reflejo, unido al cuerpo, aunque de ello no me fijo, soy sincero, pero prefiero los verdaderos sentimientos, a obtener un cruel deseo...
vierto mi ser por completo, mi corazón habla de ella aunque a veces no lo comprendo, ella mis heridas las vendo, oculto mis errores, y en su máxima sonrisa, deja entrever sus expresiones, su voz son dulces canciones, melodías hechas por su corazón, aunque comprendí que tiene dueño, no por eso dejare de insistir, sabiendo que aquel esta en el cielo, pues es Dios, su mayor anhelo.