Simplemente le amo pero no somos lo que deberíamos ser, o tal vez es lo que somos nada.
Estaría mintiendo si no les dijera que espero más de esto que tenemos
Lo amé, lo amé como ya no se ama y te juro que fue lo más hermoso que había llegado a mi vida.
Pero... ¿la verdad? La verdad no fue para nada hermosa.
¿La realidad? Un golpe muy bajo.
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¿Crees estar mentalmente preparado para un final inesperado?