Primero fueron catorce años de distancia, las cartas robadas, los impedimentos sociales, la guerra. Más tarde un compromiso inoportuno, la pasión arrebatadora, el amor improbable. Ahora, aunque el abismo que les separa es mucho más profundo, Noah no pierde la esperanza de reencontrarse con la única mujer a que ha amado. Y cada mañana, tras colocarse las gafas, abre el diario de su vida y lee, lee todo lo que ha hecho de sus días un camino pleno de momentos de felicidad. Así, a través de las páginas de ese misterioso cuaderno, descubrimos la historia de un amor que logró superar todas las barreras imaginables y que hoy, quizás, pueda superar también el muro del olvido.