El gran día había llegado. El momento que más ansiaba desde mis 18 años por fin había llegado.
Desde el momento en que finalicé mi secundario, ya había podido elegir mi destino, eso que todos planean, una meta, un sueño por cumplir. Mientras todos mis amigos se anotaban en universidades, yo estaba como loca buscando un trabajo. No fue nada fácil encontrarlo, además de eso, mis calificaciones siempre fueron altas por ende mis padres habían estado soñando a su hija en una prestigiosa universidad. Pero mi sueño no era estudiar, mi sueño iba más allá de eso...
Para mí viajar lo era todo, tantos años estudiando en la escuela, necesitaba parar y buscar MI SUEÑO.
Y así lo es, hoy me encuentro escribiendo en el aeropuerto, minutos antes de tomar mi vuelo a Corea del Sur, mi país soñado.
¿Como rayos terminé enamorandomé de él? Esa persona fría como él hielo, pero a la vez tan profunda y tierna.
Su piel era suave, su aroma era exquisito, sus ojos cafe, su mirada fria, sus pequeños labios rosados, su color tan pàlido, blanco, blanco, NIEVE.
Su actitud indiferente, la cantidad de veces que el me ignoraba, sus frases duras y pocas delicadas, su lengua afilada, frio, frio, NIEVE.
Nunca había caído en él amor así, y este jodido amor dolía. Y mucho...
• Disfruten ❤
Desde que tengo memoria, el amor siempre me pareció algo frágil. Como esos pétalos de flor que se caen con un soplo o los copos de nieve que se derriten al contacto con la piel. Tal vez por eso aprendí a protegerme tras sonrisas tímidas y abrazos suaves. Pero ellos... ellos me vieron como nadie lo había hecho antes.
Taehyung y Jungkook llegaron a mi vida como un par de estaciones opuestas: uno cálido y lleno de color, el otro intenso y envolvente como una tormenta de verano. No tardaron en hacerme suyo, con su cariño incondicional, con esas manos que siempre me sostienen cuando siento que voy a romperme.
Yo soy el maknae de nuestra relación, el más pequeño, el más mimado. Me llaman mochi porque dicen que soy suave, dulce y fácil de amar. A veces creo que no merezco tanto, pero entonces ellos me miran con esos ojos llenos de ternura y me hacen sentir que sí, que soy su mundo... y ellos son el mío.
Esta es nuestra historia. Una historia donde el amor no es perfecto, pero sí inmenso. Donde los celos, los miedos y las inseguridades también existen, pero se enfrentan de la mano. Porque cuando Taehyung, Jungkook y yo estamos juntos... todo lo demás se desvanece.