"Sé que me sigues y guías mis pasos, eso hace que siempre te sienta cerca, como una parte más de mi ser" Ella está ahí, sentada. Con el paso del tiempo cambió mucho. No solo ella, sino la gente que la rodeaba. Se distanció de sus amigos, y todavía no entiende qué fue lo que hizo mal. Pero aprendió, de a poco, a estar sola. A no escuchar nunca un "¿Cómo estás?", a no recibir nunca un abrazo, a no escuchar nunca un "Te quiero", sola fue adaptándose a no depender de nadie. Cada vez que se acuerda de viejos tiempos, se le llenan los ojos de lágrimas. Cada vez que necesita alguien en quien confiar, no encuentra a nadie. Se la pasa dibujando en soledad, o en su habitación mirando al vacío. Llora cuando la abundan los recuerdos, sin que nadie le diga que todo va a estar bien, que todo tiene solución y que después de una tormenta siempre vuelve a salir el sol. Pero, ella es especial. Odia las despedidas. Su mundo se derrumba con facilidad, pero cree firmemente, que todo cambiará.
1 part