¿Nunca has sentido una tremenda opresión en el alma? ¿Algo que se hincaba en tu pecho?¿Algo como un cristal roto, que se hundía en tus pulmones y sentías como se encharcaba tu raciocinio de tus más oscuros deseos? Marjorie no solo lo sintió, si no que fue la única que podía salvarse de ahogarse en ella misma y aun así, no lo hizo. Solo por amor.