
Nunca le gustaron los clichés. Nunca fue la chica que vestía totalmente de rosa. Nunca le gustó jugar con muñecas y nunca pensó que a sus 18 años estaría tan cansada de la vida. Hubo una época en la que todo era felicidad y esperanza, pero nada de eso es para siempre, ¿verdad? Ella deseaba más que nada creer que las cosas volverían a estar bien, pero se le hacía difícil con todo lo que estaba viviendo, sin embargo, ¿podría existir una oportunidad para ella? Claro que sí. Hacía meses que no recibía una de sus cartas. Pensó, en ese entonces, que ya se había cansado de ella, fue por esa razón que se sorprendió al recibir aquel sobre con esa hermosa letra cursiva. Le habría encantado que la chica feliz se viera reflejada en aquellas frases, pero esta vez no era así. Tenía que actuar antes de que fuese demasiado tarde, porque ella no merecía eso. Esta es su historia y ellas nunca la olvidarían.All Rights Reserved
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