Viajar al pasado significa poder cambiar el futuro, pero quedarse en el presente significa no poder ayudar al mundo. Solo han existido cien saltadores del tiempo, más de la mitad ya han muerto, Samanta es uno de ellos y sigue viva, muy viva. Acaba de descubrir su increible don pero antes de poder pensárselo dos veces se verá obligada a aventurarse en una misión que superará los límites del tiempo y el amor!