Muriendo Lentamente

La luna brillaba justo allí, en el lugar en el que debía de estar. Las estrellas titilaban de alegría. Se dispuso a meditar en lo maravilloso que había sido conocerlo, o tal vez en lo desagradable que ahora era su recuerdo.
Ella no negaba que su mundo habia cambiado al principio ya que él habia causado efectos, pero ahora existía una gran distancia ya no solo física sino literal.
El hecho de irse a dormír por las noches y despertar por la mañana sin su presencia la convertía en una chica cada vez más frágil. "Tengo sueño, mucho sueño, lágrimas que no salen, cansancio. Daria lo que fuera por que tú estuvieras aquí ", En su mente esta frase nunca dejaba de sonar.
Todos los planes habían terminado o al menos así pensaba ella...