Todo paso muy rápido no tuve tiempo para pensar solo la cargué y me fui corriendo, porque, ella sabia lo que pasaría con las drogas pero yo no me esperaba que incendiara la casa pero la bebé esta a salvo pero no puede estar para siempre en mis brazos. Salí corriendo de la casa en llamas, estaba llorando y gritando ella no paro; fui a una estación de autobuses del barrio espere durante unos minutos hasta que paso un autobús y subimos me senté en un asiento semi roto y gastado, solo me quede viendo sus lágrimas.