Caroline no sabía que hacer con su vida: perdió a sus padres, su hermano estaba desaparecido e iba a reprobar la Universidad. Albert era un tipo centrado, con vida resuelta y un compromiso por delante. No tenía problemas en su vida y él esperaba que se quedara así. Pero el Destino siempre juega y gana. Estaban hechos el uno para el otro, ellos eran hechos a la medida, un dúo perfecto. Perfect two, tu nueva adicción.