A él le gustaban los juegos, y a mi jugarlos. A él le gustaba jugar conmigo, pero se enojaba cuando jugaba con otros chicos. A él le gustaba mi uniforme, a mi su traje. Él tenía 28, yo 16. Él era mi papi, yo su princesa. Él era mi más grande deseo, yo su dulce tentación. Wattpad ha clasificado esta historia como mature, así que necesitarás seguirme para poder leer algunos capítulos. ANTES TITULADA: daddy's princess. En edición.All Rights Reserved