Dipper Pines ha despertado en la mitad del bosque y no recuerda que ha sucedido, por qué razón está ahí, ha perdido totalmente la memoria, no sabe como se llama y tampoco recuerda a su familia. Un chico aparece, es de alta estatura, delgado, rubio y con un parche en su ojo izquierdo, se dice llamar Bill Cipher.
Él le comenta con una sonrisa que ha sido enviado como su aprendiz y le dice nada más que su nombre, Dipper, no su apellido. También, le promete que él lo cuidará y que nada le pasará, que se quede con él, todo estará bien. Todo es obra del demonio Bill, quién sólo utilizará a Dipper como su marioneta para sus fines egoístas pero, con el tiempo, verá que aquel niño de tímida actitud y brillante sonrisa, será algo más para él que un simple juguete.
Esa sensación, fría, áspera, como cuando todo el mundo parece estar en tu contra, como cuando ya no te queda nadie en quien confiar.
Dipper jamás hubiera creído que su historia daría una vuelta tan drástica.
Sin embargo, su destino fue escrito en el mismo día en el que Bill decidió que el niño tenía que ser suyo.
→ Bill Cipher x Dipper Pines ←
Gravity Falls