Los padres de Amelia se han ido de viaje de negocios junto con los padres de su mejor amiga. Fiestas, amoríos, vida de adolescente y un nuevo sentimiento hacia el hermano de su mejor amiga o el mejor amigo de su hermano, ¿Será tan complicado aceptarlo? -¡Imbécil!- le grité. -¿Yo? ¿Por vengarme?- río. -¡Tenía que cubrir a mi amiga!- dije entre olas de agua y movimientos para mantenerme a flote pues no hacía pie. Él, al ver que no podía, extendió una de sus manos, la tomé y luego en un movimiento sincronizado puse mis manos en sus hombros y lo empuje hacia abajo. Él, rápido, logró aferrarse a mi cintura, y así nos hundimos ambos. Estábamos pegados bajo el agua, rodeé su cuello con mis brazos mientras pataleábamos para salir a la superficie. Nos quedamos así. Flotando, mirándonos la cara el uno al otro. Una de sus manos ascendió hacia mi mejilla, la acarició y luego suspiró.