Siempre está bajo el viejo roble que le trae recuerdos de su infancia,le encanta dibujar paisajes y leer libros con olor a nuevo,hasta que una invitación de una vieja amiga cambia sus ideales...
A veces simplemente debemos dejar que el reloj corra, que los días en el calendario pasen y que nuevas oportunidades comiencen, sólo nos queda disfrutar de todo lo bueno que venga y de los malos ratos...
Este no es un libro con protagonistas o de finales felices, simplemente es un libro en el que les muestro una versión diferente de lo que piensa un alma que está aprendiendo a vivir...